El diseño gráfico es sigiloso.
Es un medio que está ahí, que se impregna en nuestras vidas y penetra nuestros sentidos a veces sin darnos cuenta o reconocer su presencia: señalización, anuncios, boletines, portadas de libros, páginas web, tarjetas… prácticamente no hay día en que no encontremos logotipos o mensajes de marca en todos lados y en todas las actividades que realizamos, desde leer hasta comer.
Los que nos dedicamos al Diseño, amamos a esta disciplina porque forma parte de nuestra experiencia visual (y seguirá haciéndolo) además de que tiene el poder de establecer un estado de ánimo, generar tensión, sorpresa o calma, puede alegrar o seducir porque las señales visuales disparan de inmediato hacia las regiones más emocionales –y emocionantes- de nuestra mente.
Y los que no se dedican al Diseño Gráfico, ¿por qué tendrían que amarlo?
Diseño llama Dinero
El Diseño Gráfico en términos simples es un retorno de la inversión dentro de cualquier empresa o negocio porque brinda una imagen que a su vez ofrece credibilidad y confianza por lo que promueve el profesionalismo.
Los diseñadores gráficos pasan años formándose y puliendo sus habilidades para lograr que un mensaje visual comunique efectivamente su propósito: llamar la atención de la manera correcta. Las empresas por su parte, cometen el error de tratar de ahorrar dinero no contratando servicios de diseño, sin embargo, no transmiten la esencia de su imagen y termina siendo un gasto mucho mayor. El Diseño entonces ayuda a fortalecer la imagen, lo que se traduce en reconocimiento y a su vez en ganancias.
Marca la Diferencia
Cuando una empresa invierte tiempo para comunicar a través de una cultura de branding y material visual, crea un puente, un lazo emocional con sus clientes o consumidores. Hacerlo bien, no sólo permite esto sino que la ayuda a su crecimiento por medio de una reputación positiva de la cual la gente hablará. A nivel interno, los empleados se sentirán orgullosos de pertenecer a una corporación que lleva una imagen excelente hacia el exterior. El Diseño Gráfico permite que un mensaje sea lo suficientemente ingenioso y claro, para lograr que una compañía, empresa o marca -o hasta una persona- se vea como lo que realmente es: profesional, al tiempo de ganar un compromiso con el público objetivo y marcar una diferencia con sus competidores.
Aclara Ideas
Cualquier manager, gerente o dueño de un negocio o empresa siempre tiene una idea en mente acerca de cómo quiere proyectar la imagen de la Compañía, sin embargo, puede tener muchas ideas dando vueltas en la cabeza y se esfuerza en debatir qué será mejor, si la practicidad o la creatividad.
En este sentido, una Consultora de Diseño Gráfico puede orientarlo.
La mancuerna entre el entusiasmo que posee la gente y el potencial de una idea puede dar resultados asombrosos. A través de juntas, una consulta a un experto en Diseño Gráfico puede canalizar todas las ideas que se tienen guardadas para plasmarlas en una imagen o incluso, una campaña.
No sólo hay que ser un especialista en el tema para amar el Diseño Gráfico, son tres razones muy poderosas los que hacen que cualquiera caiga rendido a sus pies. Hay muchas más razones, sin embargo éstas no sólo hacen que el corazón palpite sino que se llegue a una comunión total entre una empresa y la imagen; es la interdisciplina del Diseño Gráfico. ¡Amamos al Diseño!
Fuentes:
. Graphic Design and Religión: A Call for Renewal. Daniel Kantor. Editorial GIA Publications, Inc. EEUU. 2007. 275 pp. ills.
. Benefits of Graphic Design in your Business. Clare. Blog Container Creative. Australia. Recuperado el 17 de febrero de 2011 de http://www.containercreative.com.au/2011/01/227/